La incorporación de estas tecnologías permite a transportistas adaptarse mejor a las condiciones cambiantes y mejorar la capacidad de respuesta.
Ante el incremento anual del 8,55% en el Índice de Costos del Transporte de Carga por Carretera (ICTC) reportado por el DANE, institución de estadísticas oficiales en Colombia, en julio de 2025, la industria observa en la digitalización una vía efectiva para mejorar la eficiencia y responder a un entorno en constante tensión.
Digitalización y tecnología: soluciones clave para el transporte de carga en Colombia
La transformación digital se ha consolidado como un recurso para las empresas de transporte. Según la Encuesta Nacional de Logística, el 44,9% de las compañías colombianas del sector utiliza servicios en la nube y el 25,1% implementa inteligencia artificial, reflejando un incremento en la eficacia de las operaciones logísticas de 9,5% a 10,2%.
La incorporación de estas tecnologías permite a transportistas adaptarse mejor a las condiciones cambiantes, anticipar problemas y mejorar tanto la capacidad de respuesta como la reducción de costos operativos.
Expertos del área, como Juan Angel, country manager de Drivin en Colombia, afirman que la digitalización no solo optimiza procesos, sino que también aporta competitividad en escenarios complejos: “permite a las empresas de carga tener una mayor capacidad de respuesta, reducir costos y generar mejores estrategias anticipándose a los escenarios más complejos donde la operación se puede ver afectada”.
Plataformas como Drivin, un TMS (Transport Management System) en la nube, posibilitan la optimización de rutas, el recorte de vehículos innecesarios y el ahorro de combustible, además de reducir hasta un 60% el tiempo destinado a la liquidación de transporte.
Monitoreo y automatización: avances que transforman la logística
La implementación de sistemas TMS no solo automatiza el cálculo de costos y tarifas, sino que habilita el monitoreo en tiempo real de rutas. La visibilidad de incidencias como bloqueos, retrasos o condiciones adversas permite a las empresas tomar decisiones inmediatas, protegiendo tanto las mercancías como la seguridad de los conductores.
De acuerdo con cifras de Colfecar (gremio de transporte y logística de Colombia) hasta julio de 2025, se reportaron 42 eventos en las carreteras con 206 vehículos afectados por vandalismo o incendio, 113 agresiones a transportistas y 76 extorsiones o amenazas. En este contexto, las alertas automáticas generadas por las plataformas digitales resultan una herramienta vital de protección y gestión de riesgos.
Impacto económico y perspectivas para la industria del transporte
El entorno regulatorio y las medidas impulsadas por el Gobierno Nacional podrían incrementar los fletes hasta en un 22%, superando ampliamente el IPC de 2024, con un potencial efecto inflacionario extendido a otros sectores económicos.
Defencarga advierte sobre el impacto de estos ajustes en los precios al consumidor. Ante este panorama, la digitalización de las operaciones se perfila como una inversión estratégica para proteger y optimizar la cadena de suministro, garantizando el transporte eficiente de bienes esenciales como alimentos y medicamentos a lo largo del país.
Adicionalmente, el monitoreo en tiempo real y el uso de datos aportan a la toma de decisiones, incrementan la eficiencia y fortalecen la fidelización de los clientes, lo que a largo plazo promueve el crecimiento sostenible de la industria del transporte de carga.
En un contexto desafiante, avanzar en transformación digital no solo representa un salto tecnológico, sino el acceso a ventajas competitivas esenciales para el futuro del sector.
Transporte de carga pesada: clave para la logística y el desarrollo económico
El transporte de carga pesada es una actividad esencial para la economía, ya que garantiza el movimiento de grandes volúmenes de mercancías a través de largas distancias, conectando centros de producción, puertos, zonas industriales y puntos de distribución.
Este tipo de transporte requiere vehículos especializados, como camiones y remolques, capaces de soportar y movilizar cargas de alto peso y dimensiones.
Para operar de manera eficiente y segura, el transporte de carga pesada debe cumplir con regulaciones específicas sobre límites de peso, rutas permitidas, tiempos de tránsito y condiciones técnicas de los vehículos. Además, enfrenta retos como el mantenimiento constante, los costos de combustible y la necesidad de tecnologías para optimizar las rutas y reducir riesgos en carretera.