Ministro de Trabajo solicitó la imposición de un arbitraje vinculante entre las partes en conflicto la paralización de Canadian National (CN) y Canadian Pacific Kansas City (CPKC) ha finalizado 18 horas después de su inicio, esto luego que el Gobierno de Canadá interviniera para evitar el caos en la cadena de suministro norteamericana. En concreto, el ministro de Trabajo, Steven MacKinnon, pidió a la Junta de Relaciones Industriales de Canadá (CIRB, por su sigla en inglés) que impusiera un arbitraje vinculante a ambos ferrocarriles y al sindicato Teamsters. También ordenó a la junta que ordenara a las partes prorrogar su actual contrato laboral, y dijo que los ferrocarriles deberían reanudar sus operaciones “de inmediato”.
De este modo, CN puso fin al cierre patronal a las 18:00 horas del 22 de agosto y declaró que había iniciado inmediatamente un plan de recuperación. “Mientras CN espera la orden formal del Consejo de Relaciones Industriales de Canadá (CIRB), la compañía toma esta decisión para acelerar la recuperación de la economía”.
CPKC, por su parte, dijo que se estaba preparando para reiniciar sus operaciones y que daría más detalles sobre el calendario una vez que recibiera la orden del CIRB. “El gobierno ha actuado para proteger el interés nacional de Canadá. Lamentamos que el gobierno haya tenido que intervenir porque fundamentalmente creemos en la negociación colectiva y la respetamos; sin embargo, dado lo que estaba en juego para todos los implicados, esta situación requería actuar”.
En tanto, la Conferencia Ferroviaria Canadiense de Teamsters dijo que está estudiando con sus abogados la remisión del ministro y la posible respuesta del CIRB. En una declaración el presidente de la división sindical, Paul Boucher, también acusó a los ferrocarriles de fabricar la crisis y manipular al gobierno para ignorar los derechos de los trabajadores, y atacó al gobierno por intervenir en la disputa apenas unas horas después de que el tráfico ferroviario se detuviera.
Cabe recordar que CPKC y Canadian National cerraron las puertas a los trabajadores representados por Teamsters Canada a primera hora de la mañana del jueves 22 de agosto, después de que no llegaran a un nuevo acuerdo laboral antes de la medianoche.
Afectaciones
Un paro laboral en ambos ferrocarriles podría costar a la economía canadiense hasta US$250 millones al día, según los analistas de Moody’s. Mientras que la Cámara de Comercio canadiense dijo que un paro laboral simultáneo afectaría al flujo de unos US$730 millones en bienes al día, y reduciría el acceso a los materiales necesarios para construir automóviles y viviendas, y proporcionar calefacción a los hogares.
De todos modos, la amenaza del paro laboral afectó a la economía canadiense esta semana, cuando las dos grandes compañías ferroviarias del país empezaron a reducir sus operaciones en previsión de que los trenes dejaran de circular. Los expertos advirtieron de que las medidas estrangularían a las empresas, desde el reatail a los fabricantes de automóviles, e incluso afectarían a los trenes de cercanías que utilizan las vías operadas por los ferrocarriles de carga.
Canadian National opera unas 20.000 millas de vías, conectando las costas este y oeste de Canadá con el sur de EE.UU., y transporta unos 300 millones de toneladas métricas de carga al año. La red de CPKC también recorre unas 20.000 millas, sirve a mercados de todo Canadá, EE.UU. y México, y en 2023 transportó unos 350 millones de toneladas métricas de carga.